Tras varias temporadas siendo una de las tendencias más fuertes en decoración, el estilo vintage continúa sin ceder terreno afianzándose como uno de los estilos favoritos sobre todo en los más jóvenes, que ven como algo muy atractivo todo aquello que les recuerde a un pasado que ni tan siquiera han vivido. No se trata pues de un ejercicio de nostalgia, sino más bien de una mirada hacia atrás que tiene mucho más que ver con el estilismo que con el recuerdo.

Un estilo vintage no recargado

Una de las claves para conseguir un estilo vintage agradable está en no recargar con un exceso de ornamentación las habitaciones. Puede resultar atractivo que en una sala de estar haya un rincón con una mesita camilla, una silla estilo años cincuenta y un teléfono de rosca, pero si toda la sala está saturada con adornos de los años cincuenta y sesenta puede acabar pareciendo la habitación de un matrimonio de ancianos en lugar de la de una casa moderna y con estilo.

Los muebles vintage se pueden combinar con otros más modernos para crear contrastes que hacen que el estilo sea mucho más llevadero y que permita una mayor comodidad en la vivienda. Esta mezcla de estilos le da a la casa un auténtico espíritu de decoración vintage en lugar de parecer el plató de una serie nostálgica de la televisión.

Una de las mezclas más atrevidas pero que ofrece mejores acabados cuando se hace bien es la de combinar muebles vintage con una habitación decorada estilo industrial. La frialdad y el metal de la decoración industrial contrasta con la calidez del mobiliario consiguiendo un efecto altamente original.

Vintage no es sinónimo de viejo

El estilo vintage permite jugar con objetos de otras épocas que se pueden encontrar en mercadillos y ferias de segunda mano. Pero no se debe de confundir vintage con viejo. Los muebles vintage tienen que tener personalidad y un estilo, no siendo válida cualquier pieza que se pueda comprar.

Si hablamos de cortinas el estilo vintage por excelencia mezcla los cortinones pesados de telas con mucha caída con los visillos de dibujos recargados. Las borlas y los dorados encajan muy bien con el estilo vintage, pero siempre jugando con nuevas telas que no acumulan el polvo y que permiten más comodidad. Los tejidos de flores y las sedas son también muy adecuadas para habitaciones con este tipo de decoración.