Las cortinas no dejan de estar de moda aunque cambian los materiales y las composiciones que se hacen con ellas. También los largos, ya que ahora se llevan las cortinas muy altas, que prácticamente rozan el techo. En el largo, aunque continúan llevándose las cortinas que arrastran ligeramente, se percibe que esta tendencia está en retroceso y que cada vez ganan más puntos aquellas telas justo a ras del suelo.
En cuanto a las combinaciones de diferentes tipos de cortina, la moda que ha ganado más adeptos es la de jugar con cortinas y estores consiguiendo un efecto similar a las cortinas con visillos pero ahorrando mucho espacio y logrando combinaciones mucho más originales y vistosas.
Cortinas degradadas o con contrastes
Los acabados degradados están de moda y parece que llegan con fuerza y para quedarse. Las cortinas más oscuras a ras de suelo y más claras en toda la parte superior son tendencia. El efecto degradado es lo que les da una mayor originalidad, aunque también triunfan las cortinas en dos tonos, claras en la parte superior y más oscuras abajo, esta vez sin ningún tipo de degradado, aunque sí pueden llevar alguna lista.
Los contrastes también están de moda. Una cortina en tono claro con un contraste oscuro en la parte de abajo y en el lateral o, por el contrario, con un tono oscuro en general y un vivo en color claro, incluso blanco para dar el máximo contraste.
Cortinas neutras
La moda de las paredes en colores muy vivos está perdiendo algo de fuelle. Ya no es necesario que cada pared sea de un color o que todo tenga que resaltar de una manera que a veces era excesiva. Eso no quiere decir que no se sigan llevando los colores intensos, pero el protagonismo es tan solo para uno entre todos ellos.
Por eso, las cortinas en tonos muy neutros están de moda, dejando el protagonismo del color para la pintura o para los muebles de la decoración. Las cortinas discretas, que ocupan un segundo plano y que combinan con todo son una de las tendencias de cara a las próximas temporadas.
En lugar de destacar el color se le da más importancia a los materiales, trabajando cortinas más fáciles de lavar o que no necesitan prácticamente plancha, lo que facilita mucho el trabajo en casa y hace que se ahorre mucho dinero en tintorería.